Con intención de solventar el problema, Apple liberó, como se denomina en el argot a la descarga de emergencía, una actualización menor, un parche, que lo arreglase. El efecto ha sido contrario: en algunos casos desactiva la conexión del móvil y no permite hacer llamadas. En otro casos, desactiva el sensor de huellas dactilares. Inicialmente, la actualización estaba dedicada a mejorar HealthKit,el paquete de aplicaciones con foco en el bienestar y la salud, una de las estrellas de iOS 8.
El compendio de errores y quejas se puede consultar a través de Twitter bajo la etiqueta #iOS8bugs. Hay quien se lo ha tomado con humor y ha dedicado una canción a la actualización fallida.
Apple se ha limitado a poner unas declaraciones en boca de un portavoz anónimo para responder a Recode, una página especializada en tecnología: “Hemos retirado la actualización iOS 8.0.1″. En el blog para desarrolladores de la empresa indican que el 46% de los móviles y tabletas de Apple ya se han pasado aiOS 8, el 49% se mantiene en iOS 7. El 5% restante se mantiene anclado a versiones anteriores.
Desde el pasado viernes, fecha de salida de la última generación de iPhone, Apple ha vendido más de 10 millones de unidades, entre el modelo 6 y el Plus entre Estados Unidos, donde todavía se hace cola para comprarlo, Australia, Canadá, Francia, Alemania, Hong Kong, Japón, Puerto Rico, Singapur y Reino Unido. Este viernes hará su estreno en España. La previsión de la manzana es estar presente en 115 países antes de que termine el año. A pesar del éxito de ventas, el nuevo modelo se enfrenta a un problema adicional: se suceden las imágenes de consumidores sorprendidos al percibir que su escasa resistencia hace que se doble.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario